El gobernador de la provincia, Hermes Binner, señaló que “para tener la educación que merecemos” es necesario “trabajar juntos y pensar en nuestras raíces”. Dijo estas palabras al rendir un homenaje a los maestros formados en la escuela Nº 201 de Coronda que festejó su centenario.
En este sentido, Binner afirmó que esta escuela fue “un pilar de la construcción de la provincia” y “una de las más importantes que tuvo nuestro país”, por la que pasaron “hombres y mujeres extraordinarios” que “luego fueron docentes y pergeñaron un mundo mejor a partir de la educación”.
El gobernador participó ayer junto a la ministra de Educación, Elida Rasino, de la celebración por el centenario de la Escuela de Enseñanza Media (EEM) Nº 201 “José Elías Galisteo”.
Como parte de los festejos, el gobernador y la ministra descubrieron una placa recordatoria, un mural con el nuevo logo del centenario de la escuela y plantaron un árbol en el jardín del establecimiento.
El acto se realizó frente al establecimiento educativo. Además de las autoridades provinciales, participaron el intendente corondino, Juan Carlos Naón; la directora de la EEM Nº 201, Patricia Dip; otros funcionarios, docentes y ex docentes, alumnos y ex alumnos.
Reconocimiento
El gobernador manifestó su “alegría por compartir este acto por los 100 años de una de las escuelas más importantes que tuvo nuestro país, por la que pasaron tantos alumnos que luego fueron docentes y pergeñaron un mundo mejor a partir de la educación”, señaló.
Con motivo de este festejo, Binner recordó que “hace 100 años, la Nación Argentina tenía un proyecto, se veían las muestras inequívocas de la realización de la Ley 1.420 (de educación gratuita y obligatoria), la Ley de los Guardapolvos Blancos”.
“Cien años después nos encontramos con grandes dificultades, porque ya no tenemos ese proyecto nacional y nos cuesta mucho trabajo mantener esa educación. Nos cuesta mantener las propias escuelas que hace un siglo se erigían como monumentos de la democracia, del conocimiento, como lugares en los que había una obligación ética y moral por parte de la comunidad, para que los niños ingresaran a sus aulas”, dijo Binner.
“Coronda, junto a Santa Fe y Rosario, fue un pilar de la construcción de nuestra provincia. Por esta ciudad, pasaron mujeres y hombres extraordinarios”, afirmó el gobernador, entre los que recordó a Nicasio Oroño, “una de las columnas de la civilidad en la provincia; o Alfonsina Storni, que pasó por esta escuela y quien, junto a Gabriela Mistral y Juana de Ibarbourou, constituyeron el trípode más importante que tuvo Sudamérica en las letras; o el personaje que dio lugar al Segundo Sombra, que escribió (Ricardo) Güiraldes”.
Por último, Binner se refirió a una cantidad de maestros y alumnos “que transitaron por los caminos de la provincia y del país, enseñando lo que aquí aprendieron’’. Por esta razón, “los convoco a trabajar juntos para que todos seamos responsables de la educación que nos merecemos”, agregó.
Hoy y ayer
A su turno, la ministra de Educación de la provincia, Elida Rasino, recordó: “Estamos transitando la primera década del nuevo milenio, próximos al Bicentenario y pensando en el futuro”; pero, se preguntó “¿cómo pensar en un futuro, en una educación del nuevo milenio sin mirar para atrás y asentar las bases en lo que fue la historia del normalismo en nuestro país, en lo que esta escuela y muchas otras diseminadas en nuestro territorio le dieron a esta Patria a través de sus maestros?”.
Allí, Elida Rasino hizo referencia a los docentes que “formados en la retórica y la elocuencia, hacían posible una comunicación rica, plena, de variados matices, con posibilidades de construir un sentido común y un imaginario simbólico nutrido de imágenes”.
Se trata de “esos maestros que entendían que la música, la plástica, la actividad física y la danza eran parte fundamental de la formación académica de sus alumnos y de esas personas que ya eran parte de un mundo diferente al haber pasado por la escuela”, manifestó la ministra.
Por último, Rasino aseguró: “Estamos pensando en una nueva educación y se toma fuertemente esa raíz para pensar en un alumno y en un futuro docente que pueda trabajar con las nuevas tecnologías y dar cabida a las expresiones culturales de su tiempo”. Entendiendo que siempre lo deben hacer “desde la emoción, las sensaciones, la perfección, las imágenes que nos permiten construir una única sociedad, entendiendo que el otro es también parte de uno mismo”.
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